Los
eritrocitos, también llamados
glóbulos rojos o
hematíes, son los
elementos formes cuantitativamente más numerosos de la
sangre. La
hemoglobina es uno de sus principales componentes, y su objetivo es transportar el
oxígeno hacia los diferentes tejidos del cuerpo. Los eritrocitos humanos carecen de
núcleo y de
mitocondrias, por lo que deben obtener su energía metabólica a través de la
fermentación láctica. La cantidad considerada normal fluctúa entre 4.500.000 (en la
mujer) y 5.000.000 (en el
hombre) por
milímetro cúbico (o
microlitro) de
sangre, es decir, aproximadamente 1.000 veces más que los leucocitos.